El presidente de la Corporación Venezolana de Guayana-Logística (CVG) en el estado Bolívar, el General Gómez Pimentel, intimidó a un grupo compuesto por doce trabajadores de la Siderúrgica del Orinoco (SIDOR) y de las empresas básicas de la región, tomándole fotografías en respuesta a en respuesta a la exigencia de estos trabajadores para que haya mejoras salariales en estas empresas estatales.
Estas personas conforman una mesa de diálogo por los reclamos y reivindicaciones salariales. Uno de los voceros, Yuxcil Martínez, trabajador de SIDOR, señaló que el presidente de esa empresa, Néstor Astudillo, incumplió con el salario de los trabajadores y por esto los empleados decidieron parar la planta de planchones y palanquillas por la inconformidad de la paga.
Martínez detalló que esta acción ocurrió en presencia de los miembros de la mesa, Astudillo, de Pedro Maldonado, presidente de la CVG; y del General Gómez. “El compañero Néstor Astudillo se embraguetó a querer pelear con nosotros físicamente y el General Gómez Pimentel nos estaba tirando fotos a mí y a los miembros de la mesa de manera represiva como para amedrentar”, explicó a Espacio Público.1
En ese sentido, Martínez, a través de un audio difundido por WhatsApp, hace responsable al General Gómez y a Pedro Maldonado por la integridad física de los integrantes de la mesa de diálogo.
La protesta es una de las formas que tiene la ciudadanía para ejercer su derecho a la libertad de expresión y está consagrada en la Constitución venezolana y los actos intimidatorios buscan cohibir este derecho.