En el documento se mencionó la politización de la justicia, el acoso oficial a los medios de comunicación y a la oposición política por parte del Estado venezolano. El Gobierno de Estados Unidos congratuló a esta nación por el rechazo a la reforma constitucional que se sometió a referéndum el pasado diciembre. “En Venezuela, los esfuerzos de un dirigente elegido democráticamente para minar las instituciones democráticas e intimidar a la sociedad civil se topó con una vigorosa resistencia”.
En las mismas líneas se acusó al presidente Hugo Chávez de utilizar los mecanismos legales, económicos, regulatorios, judiciales y retóricos para crear un entorno de intolerancia hacia la prensa crítica.