Según informó Vílchez, mientras se encontraban en el lugar para registrar el levantamiento de los cuerpos, un grupo de mujeres los agredió con piedras, cuerdas, palos y tubos al ver que cargaban una cámara fotográfica. Ambos fotógrafos sufrieron heridas resultado de golpes y patadas.
Los trabajadores de la prensa pudieron huir gracias a la ayuda de otros colegas que se encontraban en el sitio.
Fuentes:
Entrevista realizada por Espacio Público 08/04/2011