Desde el pasado jueves 6 de marzo casi tres mil reclusos de ocho recintos penitenciarios del país se encuentran en huelga de hambre, solicitando beneficios procesales, celeridad procesal y el cese de las violaciones de los derechos humanos.
Nieto aseguró que cada minuto que pasara sin que el Gobierno se sentara a dialogar con una comisión dispuesta para tal fin, tornaría más grave la situación. Se teme que la huelga de hambre pueda generar motines. Efectivos de la Guardia Nacional redoblaron presencia en los penales y además están evitando que familiares de los reclusos puedan suministrarles agua o caramelos.