El jueves 22 de mayo los jubilados y pensionados de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG)y la Industria Venezolana de Aluminio (Venalum) culminaron la huelga de hambre que mantenían desde hace cinco días. La manifestación se suspendió gracias a un acuerdo con el titular de la CVG y ministro de Industrias Básicas y Comercio, Rodolfo Sanz. El representante de las empresas pidió un plazo de una semana, hasta el jueves 29 siguiente, para encontrar una solución al problema.
Los reclamantes exigen el cumplimiento del dictamen del Tribunal Supremo de Justicia que ordena la homologación de sus salarios, debido a que consideran que los derechos no se negocian. Así mismo indicaron que, de no haber pronta respuesta, retornaran a la huelga de hambre e intensificaran su protesta.